La Unión Europea, a través de la estrategia Europa 2020, promueve evolucionar a un nuevo modelo económico basado en la economía circular que reduzca la producción de residuos y los utilice como recursos.
La industria de la recuperación y la gestión de residuos tiene como objetivo recoger, tratar y recuperar de la manera más eficiente posible los residuos, volviéndolos a reintegrar en el sistema como nuevos recursos o materias primas secundarias. Es decir, lograr que los residuos se utilicen como materia prima en los procesos productivos. Así se evita su eliminación y la utilización de nuevos recursos naturales, aportando de esta manera beneficios ambientales, creando riqueza y generando empleo.
En el caso concreto de los residuos de papel y cartón, Europa está a la cabeza en reciclaje. Se roza ya el límite técnico de recogida. El aumento de las tasas de recogida y reciclado la han posicionado como un referente mundial.
En el año 2013 se recogieron y procesaron 58 millones de toneladas de papel recuperado. De las cuales 49 millones fueron consumidas por la industria recicladora europea. Las 9 millones excedentarias exportadas a otros mercados, al no poder ser asumidas por el europeo. El excedente de papel recuperado europeo se exporta, entre otros, a China, destino clave para del reciclado mundial, por ser el país de mayor crecimiento económico y aquel en donde se producen y se embalan la mayoría de bienes que consume Europa.
De este modo el sector de la recuperación contribuye, en línea con las políticas europeas, a alcanzar una economía circular basada en la sociedad del reciclado:
Fuente: Repacar